El estadio de Independiente, de Argentina, sería suspendido por el resto de la Copa Sudamericana, trascendió hoy en Buenos Aires, tras la agresión al arquero Martín Silva, de Defensor Sporting, de Uruguay.

Independiente, que ganó 4-2 y avanzó a cuartos de final, sería multado por el piedrazo arrojado por un fanático que dejó sangrante a Silva, quien se repuso y decidió seguir jugando, aunque su club afirmó que el partido debería haber sido suspendido.

"A criterio del árbitro, la situación fue un hecho aislado. No fue una situación en la que cayeron 20 piedras y una le pegó", dijo el veedor del partido, Hugo Figueredo. "El árbitro constató que el arquero estaba en condiciones de seguir".

Figueredo agregó que "si el jugador no hubiese estado en condiciones de seguir, el partido no hubiese seguido. El motivo por el que el partido siguió, es que el arquero pudo continuar".

Así lo afirmó Dante Prato, presidente de Defensor Sporting, aunque también el propio DT de Independiente, Antonio Mohamed, elogió la actitud de Silva, pero dijo que si el árbitro brasileño Wilson Seneme hubiese decidido anoche suspender el partido "estaba bien".

"El episodio es comparable" al ataque que recibió el juez de línea Pablo Fandiño en un partido Boca Juniors-Cruzeiro de 2008, que provocó la suspensión de la Bombonera por el resto del torneo y una multa de 30.000 dólares para el club argentino.

Así lo afirmaron hoy fuentes de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) a la página web del diario La Nación (canchallena.com) y estimaron que la sanción a Independiente sería entonces similar a la que se aplicó contra Boca.

"A mi el árbitro me dijo que había sido un hecho aislado y que si el arquero no podía seguir que ingresara el suplente", contó Prato, quien agregó que las autoridades de Independiente, en cambio, "se portaron como unos caballeros y se disculparon. No tengo más que palabras de agradecimientos para ellos".

"Esto no tiene que pasar en ninguna cancha del mundo. El arquero decidió seguir porque dijo que no era ´cagón´, pero si se suspendía estaba bien. Es la mancha negra de la noche", dijo a su vez Mohamed, quien se preguntó "¨qué hubiera pasado si (el proyectil) le pegaba en el ojo?".

La prensa de Buenos Aires elogió la vuelta de "la mística copera" de Independiente, siete veces campeón de la Copa Libertadores, pero en fuerte declive desde hace años, pero repudió la agresión a Silva y coincidió en que el partido debería haber sido suspendido. (ANSA)

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