La noche más perfecta del Barça

No se recuerda nada igual. La última vez que el Barça pisó el Emirates hace un año rozó la perfección. Era la ida de los cuartos de la Champions e hizo una primera media hora sublime, con 15 ocasiones de gol y un despliegue futbolístico seguramente irrepetible. "Jugamos mejor que nunca". Palabra de Guardiola.

Manuel Almunia no olvida la mayor avalancha de fútbol que ha sufrido en su carrera. Desde el primer minuto, el Barca se apoderó del balón y resultó un ciclón. No se ha visto nada igual en la historia de la Champions. Y eso que los de Guardiola fueron incapaces de hacer un gol. Por eso pareció mucho más increíble.

Una jugada en el minuto 14 simbolizó a la perfección el aluvión azulgrana. Maxwell la puso desde la izquierda, Ibra la dejó pasar y Xavi se quedó cerca del área chica solo con Almunia, que sacó una mano espectacular. El rechazo lo agarró Keita al borde del área, su disparo lo desvió Alves y Song sacó con la cabeza bajo palos. No acabó ahí la jugada. Al vuelo enganchó Messi un zurdazo que sacó Almunia con el cuerpo a tierra de forma prodigiosa. Ver para creer.

Las palabras de Cesc explican a la perfección lo que sintieron aquella noche los jugadores del Arsenal, acostumbrados a manejar los partidos y ser los dueños del balón, mucho más en su casa, el Emirates Stadium: "Te piensas que les vas a quitar la pelota y es difícil. Ya lo sabíamos, pero una cosa bien distinto es experimentarlo. Nunca nos había pasado en la vida".

Busquets, Alves, Messi, Ibra, Keita, Messi, Ibra, Xavi, Alves, Messi, Xavi, Pedro, Piqué, Xavi y Busquets remataron sin piedad y sin suerte ante el marco de Almunia en los primeros 25 minutos. Tan mal lo vio Wenger que quitó a Arshavin y metió a Eboue para contener el empuje del mejor Barça que se recuerda.

"Es la mejor primera parte desde que estoy aquí. Hemos jugado mejor que nunca", reconoció Guardiola. Otra historia fue lo que pasó luego. Ibrahimovic hizo dos goles al inicio de la segunda parte, salió Walcott que hizo el 1-2 y una jugada al final que acabó con penalti de Puyol a Cesc supuso el 2-2 definitivo. Pero en la retina había quedado media hora para la historia.

Marca.com

Fue una auténtica exhibición de fútbol. Una pena que este año no se repitiera.